Ensenada, B.C. a 9 de noviembre de 2021.-Cámaras, organismos de la construcción y colegios de ingenieros y arquitectos, plantearon al encargado del despacho de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada (CESPE) Jaime Alcocer Tello, la problemática que enfrenta la ciudad por el desabasto de agua potable y la falta de infraestructura para su conducción y tratamiento.
Convocados por el dirigente de la Asociación Mexicana
de la Industria de la Construcción (AMIC) Edgar Rojo Medina, estuvieron
presentes, los presidentes Cruz Adrián Santos Macías, de la Cámara Mexicana de
la Industria de la Construcción de Ensenada; y, Abel Medrano Salazar, Compañías
Mexicanas de la Industria de la Construcción.
También acudieron, los presidentes de los colegios de
Ingenieros Civiles de Ensenada (CICE), Carlos Brasil García Muñoz; de
Profesionales de Ingeniería Civil de Ensenada, Agapito Álvarez Duarte; y,
Asociación Vanguardista de Ingenieros Civiles de Ensenada, José Juan Villegas
León, así como los dirigentes de Arquitectos Profesionales de Ensenada, Armida
Tirado Álvarez; y, de Arquitectos de Ensenada, Juan Jesús Vázquez Meza.
Durante la reunión de trabajo, Alcocer Tello indicó
que es preocupación de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, resolver el
tema del agua, y como tal está contemplada entre sus acciones durante los
primeros 100 días de su administración para lo cual ya se le presentaron proyectos
que en su momento anunciará la mandataria.
El funcionario reconoció fallas en el suministro por
las intermitencias en el denominado Flujo Inverso que viene desde Tijuana y el
colapso de un tubo de succión del agua de mar de la Planta Desaladora que le
impide cumplir con los 250 litros por segundo a los que se comprometió.
“De hecho la planta nunca le ha cumplido a Ensenada,
menos ahora que está entregando menos de la mitad del agua que debería suministrar”,
dijo el encargado del despacho del organismo operador.
Alcocer Tello informó a los directivos de organismos y colegios que otros de los problemas graves que enfrenta el organismo es por el colapso de la planta de tratamiento de “El Gallo”, mismo que requiere de rehabilitación y poner en marcha el clarificador, mismo que demanda una inversión cuantiosa.
Adelantó que se trata de un proceso que lleva tiempo
que podrá resolverse para el verano próximo, tiempo en que las aguas
contaminadas de la bahía y la playa de ya estén nuevamente en posibilidad de
recibir bañistas.
Señaló que unos de otro de los temas que afectan
negativamente las finanzas de la Cespe es el clandestinaje en el uso del agua,
no solamente por el “aguachicoleo”, sino, porque hay mucha gente que no paga
agua ni drenaje, situación que provoca pérdidas que rondan los 300 millones de
pesos anuales.
El funcionario indicó que se buscan alternativas para
el abasto, pero dejó entrever que la ampliación de la desaladora de 250 a 500
litros por segundo no es bien vista por el gobierno en virtud del
incumplimiento de la empresa, “si no cumplen con los 250, es difícil que lo
hagan con el doble.”
A la propuesta de realizar mesas técnicas de trabajo
con los grupos de expertos –como los colegios y constructores- para buscar
soluciones, la respuesta de éstos, fue que lo que se requiere son acciones,
porque el tema está muy estudiado y en todo foro que se realiza se llega a la
misma conclusión, y lo que se requiere son acciones.
PIDEN
AGUA EN BLOQUE
Lo que se requiere ya no son las alternativas de
siempre de sacar más agua de los pozos salobres de maneadero, señalaron
organismos presentes en la reunión como el caso del Colegio de Ingenieros
Civiles de Ensenada y Compañías Mexicanas de la Industria de la Construcción.
Ante el déficit de más de 800 litros por segundo, las
alternativas, insistieron, son la construcción de la segunda etapa de la planta
desaladora o la construcción del acuerducto Tanamá-Valle de Guadalupe con su
respectiva presa y potabilizadora para que haya un flujo permanente del
líquido.
Durante el encuentro también se habló de la necesidad
de garantizar el abasto como requisito para poder incrementar la tarifa o el
establecimiento de una tarifa estatal para que ciudades donde no falta el agua
como Mexicali, ayuden a financiar la infraestructura en donde no hay agua y dar
a todos los bajacalifornianos el mismo trato y garantizar el derecho al agua.
Otra de las peticiones que le hicieron Alcocer Tello
fue la necesidad de mejorar la calidad del agua, sobre todo disminuir la
salinidad ya que representa un grave problema para electrodomésticos como las
lavadoras que disminuyen su durabilidad, entre muchos otros problemas que se
crean por esa razón.
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